jueves, 20 de noviembre de 2008

¡PERO QUE TRAVIESO ERES, CORAZON!

Vaya travesura que te has inventado.
Y yo te sigo la corriente, siempre te sigo la corriente. Tú mandas el corrientazo a mi cerebro, de repente, y él va y te obedece, impulsado por un resorte.
Pero tengo que reconocer, corazón mío, que es una bella travesura.
¿Como es posible que ahora, a tus años, te ilusione hacer estas cosas? No cambies nunca. Late, late y late, muchas más veces. Yo te lo pido, tú estás vivo, y yo también. Somos el equipo perfecto.
TUN-TUN...TUN-TUN...TUN-TUN...

No hay comentarios: