jueves, 14 de enero de 2010

LOS MIMITOS DE DIOS




Envuelta en la presión del día a día, abandoné un poco mi cacharrillo de ordenador.
Gracias a los mimitos de Dios, que noto en las pequeñas manos de mis peques, y en todo lo que me rodea, sigo aquí.
¿Que música quieres, mami? Me pregunta uno de mis tesoros. Quiero "Mi Princesa", Mi Princesa de Bisbal.
Y en un pis pás, la tengo.
Yo también me enredo entre la gente que decide taponarse los oídos, cuando la vida a las ocho y media de la mañana no es sonido, es ruido.
Y lo escucho, mientras doy un paseo de media hora hasta mi trabajo.
Mi caminar sigue el ritmo de su voz, porque él canta sólo para mí.
Gracias, David Bisbal. Tú me cantas al oído, y yo me convierto en La Princesa de tus Sueños Encantados.
¿Por qué no?

No hay comentarios: